Pues bien, el concello recientemente ha decidido proceder a la prohibición del tráfico rodado sentido subida que estaba permitido para los residentes. No vamos a entrar en valorar esa decisión. Seguro que está tomada con plena responsabilidad y por razones prácticas y de seguridad. El caso es que ahora el tren circula de bajada. Y lo hace acompañándose de la difusión por altavoces de una música estridente a un volumen desconsiderado superior en algunos momentos a los ochenta decibelios. No entendemos esa escandalera ni sus razones pero tenemos que aguantar cada hora esa circunstancia. Enfermos, niños pequeños y bebés en descanso, estudiantes y trabajadores en las casas sufren ese impacto sonoro sin posibilidad de escapar del mismo. Tenemos noticia de que esta situación también se produce en otros puntos del recorrido, circunstancia que ustedes podrán sin duda acreditar.
Por supuesto que hemos enviado al señor Alcalde sendas peticiones de solución y respeto y de hecho hemos observado desde el día de hoy una reducción del impacto sonoro, entendemos que ordenada por él, pero que no satisface nuestros humildes deseos de tener una cierta tranquilidad en nuestras casas”.