Egoísta: dícese de aquel que antepone el interés propio al ajeno, lo que suele acarrear un perjuicio a los demás. No hace falta decir mucho más.
Egoísta es aquel que, por encima de todo, se va de botellón o hace una fiesta en su casa sin importarle lo que pueda venir después, es decir un brote de covid. Egoístas son aquellos que incumplen todas las normas habidas y por haber en los locales hosteleros y en la calle con el único objetivo de hacer lo que les viene en gana, sean cuales sean las repercusiones o sanciones que eso les pueda ocasionar al sector.
Egoístas son aquellos y aquellas que se van de viaje de estudios a Mallorca y a vivir la fiesta sin el más mínimo cuidado y después pasa lo que pasa. Luego vienen las críticas y las quejas porque están confinados en un hotel. Habría que recordarles que hace poco más de un año todas y todos estábamos confinados en nuestras casas, con o sin balcón, con o sin finca, con o sin compañía. ¡Qué pronto se nos olvidan las cosas!
Para analizar también está el por qué se permiten y se organizan estos viajes cuando todavía no hemos alcanzado la famosa inmunidad de rebaño. Sería para estudiar en profundidad todo esto. Los adolescentes y los jóvenes de hoy tienen toda la vida por delante para disfrutar. No pasa nada porque durante más de un año tengan que cambiar sus hábitos. Los demás también lo hemos hecho y no nos ha hecho ninguna gracia, pero por responsabilidad la mayoría hemos cumplido y hemos evitado contagios a nuestro alrededor, ingresos hospitalarios y muertes.
No hemos salido mejores de esta pandemia. Hemos salido bastante peores. Ahora somos mucho más egoístas, lo importante es que yo esté bien, el de al lado o el de enfrente nos dan igual.
Carmen Cruzado