Nota de Prensa
EL PP INSTA AL ALCALDE DE VIVEIRO A REGULAR LA SITUACIÓN DEL SUMINISTRO ELÉCTRICO EN LAS DEPENDENCIAS MUNICIPALES.
En sus desvaríos ha vuelto a declarar que el suministro de corriente al teatro Pastor Díaz, su instalación, protección y mantenimiento, además de su puesta en funcionamiento, le correspondía solamente al anterior gobierno local.
Recordarle al sr Roel que, después de casi dos legislaturas el Teatro y el consistorio siguen con luz de obra, y que el nuevo transformador continúa sin funcionar impidiendo con ello el uso del ascensor y el paso a personas con discapacidad a las dependencias municipales para gestionar asuntos administrativos. Tardó tanto en presentar los proyectos ante industria, los boletines y el certificado de alta del edificio ante este organismo, que ha dado tiempo a las correspondientes modificaciones en la normativa que exigen una nueva adaptación. Si además añadimos las ingentes cantidades adeudadas a BEGASA podrían ser éstas y son, las causas del retraso.
Es muy significativo que la concejala de cultura a 30 de Enero de este mismo año afirme que la avería surgió al conectar todos los focos del escenario y el sistema de calefacción. Tendrá que preguntarse el sr alcalde si algún miembro de su gobierno dio orden de alterar los limitadores y diferencial del Teatro sin prever la puesta en funcionamiento del transformador.
Vergüenza debería de darle al señor regidor siquiera mencionar el tema y justificar su dejadez con la retirada de un poste de cemento que sostenía el cableado en la parte superior de la plaza, y la retirada de una palomilla en el viejo consistorio. Algo insignificante que demuestra las prioridades de un mandatario, más preocupado por divertir al personal, que por poner en marcha un transformador que garantizaría luz, calefacción, y permitiría el uso del ascensor en el concello.
Desde que el PP dejó de gobernar en Viveiro es evidente que el sr Roel y su concejala de cultura habrán de preocuparse por adaptar la instalación eléctrica a la nueva normativa, porque desde el 2003 no se ha invertido un solo euro en la conservación y mantenimiento del inmueble.